La obra. Dramaturgia en 1 acto
—El diablo me vendió su alma.
— el Zambullista (@Zambullista) 21 de octubre de 2016
—Y a cambio le diste…
—El paraíso.
—¡¿Vas a dárselo?!
—Cuando se muera y pague.
—Pero es inmortal.
—Sí.
—¡Caí!
La crítica resumiendo la obra
Con cobro posmortem, el alma de un inmortal no tiene comprador. Con otro inmortal juega a que en un futuro ? se la canjeará por el paraíso.
— el Zambullista (@Zambullista) 21 de octubre de 2016
El debate
—¿El alma del diablo vale el paraíso?
— el Zambullista (@Zambullista) 14 de marzo de 2017
—Perdemos la felicidad perfecta a cambio de eliminar la infelicidad perfecta.
—EL Premio y EL Castigo.
—¿Es negocio? ¿Cómo va a persuadir y a disuadir Dios sin premios ni castigos?
— el Zambullista (@Zambullista) 14 de marzo de 2017
—¿Aún lo necesitará hacer, ya sin el diablo metiendo la cola?
—Mejor si no necesita: se ahorra una frustración, porque de todos modos no podría.
— el Zambullista (@Zambullista) 14 de marzo de 2017
—Si no puede lo que no precisa, es carencia, no pérdida.
—Carencia o pérdida, Dios ya no sería lo que era cuando podía prometer ese premio y amenazar con ese castigo.
— el Zambullista (@Zambullista) 14 de marzo de 2017
—Su omnipotencia pierde poder.
—Es al que más le conviene que el trato sea un chiste y su concreción un imposible.
— el Zambullista (@Zambullista) 14 de marzo de 2017
—Y su formulación un absurdo: un inmortal vende su alma.
La crítica jugando con el chiste de la obra
Un inmortal no puede vender su alma.
— el Zambullista (@Zambullista) 21 de octubre de 2016
? su alma no le pertenece.
? un inmortal no tiene alma, CQD.
Lástima, porque las almas son inmortales.
La crónica titulando con los juegos de la crítica
El desencuentro del siglo (y de todos los tiempos): un alma inmortal sin cuerpo, un cuerpo inmortal sin alma. Un fantasma y un desalmado.
— el Zambullista (@Zambullista) 21 de octubre de 2016
Comentarios (2)
El desalmado no tiene alma, el despiadado no tiene piedad: entre los 2 no hacen ni 1 gramo de empatía. Es decir, son los peores victimarios.
— el Zambullista (@Zambullista) 21 de octubre de 2016
—Si nos desviamos del tema, terminamos perdidos: "¿De qué estaba hablando?"
— el Zambullista (@Zambullista) 7 de marzo de 2017
—Ah, sí, del desvío de un desvío de un desvío de un chiste malo.
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